viernes, 23 de enero de 2015

Trucos muy útiles de Limpieza para nuestro hogar

1) Alfombra siempre impecable

- Algo que parece misión imposible, no lo es para una coalición de agua tibia, un chorro de amoníaco y un pepino (en forma de zumo). Mézclalos en un cubo y empapa en él un trapo. Después, pásalo por la superficie de esa alfombra rebelde y verás cómo recoge la suciedad acumulada en su superficie, dejándola brillante y esplendorosa.

2) Mamparas de ducha sin manchas

- Para conseguir unos cristales resistentes a suciedad y empañamiento, aplica aceite de bebé.

3) Muebles del baño resplandecientes

- ¿Tu lavabo ha perdido brillo? ¿El w.c. parece viejo? Calienta vinagre blanco y aplícalo con un paño seco, para hacer renacer de las cenizas tanto su color como su brillo.

4) Olvida los hongos en el baño

- Coge el cubo y llénalo con agua, un chorrito de cloro y un puñado de sal. Mezcla y frota esta solución con ayuda de un cepillo. Será una masacre para los hongos que tu salud y la de los tuyos agradecerán muchísimo. Eso sí, ventila bien durante y después del proceso.

5) Eliminar el óxido de los metales

- ¿Tijeras o cubiertos oxidados? Prueba a frotarlos con una cebolla partida por la mitad, y después frota con jabón y seca bien para mantenerlos a punto.

6) Acero inoxidable como una patena

- Los camareros de medio mundo lo saben bien: el secreto está en la ginebra. No hace falta que te pongas exquisito, la marca más barata hará su función perfectamente: empapa un trapo y frota bien la superficie hasta dejarla brillante.

7) Deja tu horno como nuevo

- Nuestro truco casero: aplica una mezcla de agua y bicarbonato en el horno caliente y deja actuar a temperatura media durante al menos una hora. Después, pasa un trapo húmedo para retirar los restos y verás los resultados.

8) Muebles de bambú brillantes

- Recupera su esplendor pasándoles un limón por la superficie.

9) Recupera tus cortinas de ducha

-Es inevitable que se pongan feas con el paso del tiempo y la humedad. Sumérgelas en un cubo con lejía y algo de detergente. Después de enjuagarlas, cuélgalas de nuevo y disfruta del resultado.


10) Escobas y cepillos de barrer como nuevos

-Vale, son herramientas de limpieza. Pero no tienen por qué estar hechas un desastre antiestético, ¿verdad? Para recuperarlas, introdúcelas en un cubo con agua y un cazo de amoníaco. Deja que trabaje y después enjuaga bien con agua. Seca completamente antes de volver a usar.

jueves, 22 de enero de 2015

Cómo proteger tu hogar ahora que llega el Frío

Con la llegada del frío se multiplican los avisos por rotura de calderas, tuberías, tejados, aparición de filtraciones y muchos otros problemas asociados al mal tiempo.



1. UN BUEN AISLAMIENTO DE PUERTAS Y VENTANAS ES VITAL
Te ahorrará muchísimo dinero en la factura de la calefacción, y mucho más en reparaciones si una grieta en las estructuras logra agrandarse por el hielo y termina produciendo una rotura mayor y más costosa.
Vigila estas fisuras y pide a un profesional que las repare, porque serán la puerta de entrada a tu hogar de filtraciones, humedad, moho y un sinfín de problemas estéticos y sanitarios.
Y sobre todo, refuerza el aislamiento de puertas y ventanas, renovando las juntas y equipando tu casa con doble acristalamiento y tapas para la parte inferior de las puertas.
¿Quieres saber cómo prevenir, detectar y tratar humedades y filtraciones en casa? En el post del enlace tienes nuestras pistas para manitas aficionados y cómo atacar el problema.

2. LAS CALDERAS SE AUTOPROTEGEN DEL FRÍO… ¡COMPRUEBA QUE ESTE MECANISMO FUNCIONA!
No es que sean Transformers, pero la mayoría de las calderas se encienden automáticamente cuando detectan niveles de frío que pongan en peligro su red de tuberías frente a la congelación.
Si este mecanismo de autodefensa fallase… mejor no queremos ni pensarlo: chequea que funciona correctamente.
3. AÍSLA TUS TUBERÍAS
Las exteriores y las muy cercanas a la intemperie son especialmente delicadas ante fuertes bajadas de temperatura: envuélvelas en materiales aislantes como la coquilla u otras espumas similares, que puedes comprar en tu tienda de bricolaje de barrio.
Y si no vas a estar en casa durante un tiempo, drena las tuberías para que el agua que permanece en ellas no se congele y reviente las estructuras. Haz lo mismo con las mangueras en jardines y terrazas, si no quieres ver cómo se resquebrajan.
4. NO DEJES QUE LA NIEVE SE ACUMULE EN TU TEJADO
Pesa. Más de lo que te imaginas. Y esa presión, añadida a la humedad constante, aceleran el agrietamiento y la filtración de agua hacia el interior de tu vivienda. Retírala en cuanto veas más de unos centímetros de nieve y, si necesitas ayuda, cuenta con los mejores profesionales que puedes contratar para salvaguardar tu hogar.