El primer dilema a la hora de escoger un armario lo encontramos a la hora de elegir entre armarios de puertas correderas o armarios de puertas batientes. Y es que las dos opciones no son adecuadas para todo tipo de habitaciones. Así, si como la mayoría cuentas con un dormitorio con pocos metros cuadrados, te recomendamos que optes por un armario con puertas correderas, que no necesitan espacio delante para abrirse. Sin embargo, tienen algunos inconvenientes, como que, en su desplazamiento, las puertas pueden rozar la ropa. Por el contrario, los armarios de puertas abatibles dan una sensación de ligereza espacial y suelen ser más cómodos, ya que nos dejan todo el armario al descubierto, algo que no suele pasar con las puertas correderas. Por tanto, si tienes espacio lo que nosotros te recomendamos es que optes por las puertas de toda la vida.
Estilo y colores
Lógicamente, el armario tiene que combinar con el resto de los muebles de la habitación. Así, deberá ser, al menos, del mismo material, del mismo estilo o de la misma tonalidad, siempre y cuando no busques una decoración ecléctica. Eso sí, al tratarse de una pieza que ocupará gran parte de la habitación, si dispones de poco espacio puede ser una buena idea que te decantes por un armario blanco. Y es que, como sabes, este color ayuda a aumentar el espacio visualmente. Si se trata de un dormitorio con poca luz natural, el blanco también será una buena opción, ya que también es ideal para potenciar la luminosidad. Además, para estos dos problemas (falta de luz y pocos metros cuadrados), puede ser una genial idea hacerse con un armario con espejo, ya que este elemento también potencia la luminosidad y aumenta el espacio visualmente
El tamaño del armario
En cuanto al tamaño del armario, dependerá del espacio que tengas en el dormitorio, pero también de la ropa que tengas que guardar en él. Así, aunque cuentes con muchos metros cuadrados en la habitación, no tienes por qué hacerte con un armario de grandes dimensiones, ya que el espacio que te sobre en la habitación puede servirte para otras cosas: colocar un sofá, un espejo, un zapatero… Eso sí, si tienes mucha ropa o se trata de un armario compartido y tienes la suerte de tener espacio de sobras en la habitación, no dudes en hacerte con un armario grande. En cambio, si tienes un dormitorio pequeño, no te quedará más remedio que hacerte con un modelo de dos o tres puertas. Los hay altos y con interiores muy prácticos para poder organizar tus cosas sin problemas.
El armario importa mucho, si es una habitación pequeña un armario empotrado va de maravilla y así le da un punto diferente a nuestro dormitorio infantil original
ResponderEliminar